miércoles, 24 de septiembre de 2014

Escuchando


Hoy me senté con él durante dos horas seguidas. Él lloraba y no paraba de hablar.

Yo solamente escuchaba y asentía con la cabeza. Al final le abracé y, por un tiempo, simplemente permanecimos en silencio. No le dije una sola palabra.

Esta noche, justo después de la cena, se presentó en mi cuarto y me dijo "Gracias. Ni siquiera recuerdo lo que me dijiste antes, pero me siento como si me hubieran dado el mejor consejo de mi vida".

                                                                                                  ANÓNIMO



3 comentarios:

  1. Que foto más bonita. Todos necesitamos que nos escuchen. Besos!

    ResponderEliminar
  2. Escuchar es lo que todos deberíamos aprender. Saludos

    ResponderEliminar
  3. ser escuchados, muchas veces solo eso necesitamos... desahogarnos

    ResponderEliminar